El pasado jueves 30 de noviembre en las instalaciones de la Universidad del Valle, se reunieron cerca de 90 personas alrededor de un espacio de reconciliación y esparcimiento para fortalecer los lazos de humanidad en la población vulnerable de la ciudad de Cali y consolidar paso a paso caminos de paz.
La actividad, organizada por el Programa de atención psicosocial y salud integral para las victimas (Papsivi) y la Red de Salud del Suroriente (ESE), contó con el apoyo de la Agencia para la Reincorporación y Normalización (ARN), la Unidad de la atención para las Víctimas, la ARN Valle del Cauca, Heartland Alliance y la Universidad del Valle del Cauca.
La actividad posibilitó un espacio de encuentro entre víctimas y personas en reintegración que permitió el reconocimiento de historias de sobrevivencia, la dignificación y el reconocimiento de su humanidad´, contribuyendo a la reconstrucción de los vínculos, el tejido social y la cohesión sociocultural de la población.
Cuatro personas en reintegración, familiares junto al resto de invitados participaron de diferentes actividades de integración y rompehielo, disposición actitudinal y compartir de experiencias y conocerse.
"En este espacio de reparación simbólica buscamos dar una dignificación a las víctimas del conflicto armado compartiendo vivencias y saberes con diferentes perfiles poblacionales teniendo en cuenta el contexto y el proceso que lleva el país actualmente", explicó Karolina Otalvora, coordinadora del programa Papsivi de la red de salud sur oriente.
Así mismo, Elvira Macías* asegura que propiciar la reconciliación entre los colombianos es posible. "Compartir estos espacios nos permiten entender otras realidades y aceptar que a pesar de nuestras diferencias y temores, podemos construir un mejor futuro para nuestros hijos y nietos".
La apuesta por propiciar este tipo de iniciativas nace en la necesidad de que los corazones de aquellas personas que han estado afectados por el conflicto armado se sensibilicen y se conviertan en multiplicadores de paz. Al final de la jornada se permitió a través de acciones educativas conducir a las personas a sanar sus heridas y elevar su autoestima, redireccionar su rumbo y desaprender el lenguaje de la violencia.
*Nombre cambiado a petición de la fuente.