Gracias a un trabajo articulado entre ACR, el SENA, la OIM y USAID, un grupo de 28 desmovilizados de guerrillas, procedentes de varias zonas del país, y que están en proceso de reintegración, son hoy aprendices de cocina, metalmecánica, construcción y electricidad, y se abren camino en el sector laboral.
Lucía* sueña con tener una empresa de chocolates. Y aunque nunca pudo ir a una escuela, la vida hoy le está dando una segunda oportunidad para reconstruir su proyecto de vida lejos de las armas. Lucía se fue a sus 13 años a un grupo guerrillero, huyendo del maltrato verbal de su padre. "Fue una decisión boba", asegura. Ella, desmovilizada y en proceso de reintegración, estudia segundo de primaria y también Culinaria. Se capacita mientras recupera, poco a poco, esos 27 años que le arrebató la guerra.
Raúl* quiere ser ingeniero. Aún le falta –reconoce–, pero ya empezó a recorrer ese camino. A sus 19 años se está formando en Construcción. Vestido de casco y overol, desde el mes de octubre asiste a clases teóricas y prácticas, al tiempo que recibe acompañamiento psicosocial. En tres semanas terminará sus 400 horas de formación y continuará abriéndose futuro.
Ambos hacen parte del grupo de 28 excombatientes que se están capacitando en electricidad, construcción, metalmecánica y cocina, en búsqueda de su sostenibilidad social y económica. Todo esto, gracias un convenio entre la Agencia Colombiana para la Reintegración (ACR) y el Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA), con el apoyo técnico de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y financiero de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID).
Se trata del modelo de reintegración temprana en espacios de formación productiva, con énfasis en actividades industriales y de servicios, a través de la metodología 'Aprender Haciendo', que se viene desarrollando desde el mes de octubre en Popayán, Cauca. Los beneficiados son desmovilizados que se cansaron del conflicto armado y que se están reintegrando a la sociedad, procedentes de varias zonas del país, como: Eje Cafetero, Antioquia, Putumayo, Alto Magdalena, Huila, Caquetá, Meta, Casanare y Cauca.
Para socializar los logros y avances de este proyecto, los directores nacionales del SENA, Alfonso Prada, y de la ACR, Joshua Mitrotti, visitaron este lunes las instalaciones del SENA, Alto Cauca, en Popayán, donde conocieron de primera mano las experiencias de los aprendices beneficiados y compartieron a medios de comunicación el impacto de estas iniciativas que dan cuenta del fortalecimiento institucional en Colombia con miras a la construcción de paz.
"Este es un modelo de reintegración temprana, lo que buscamos con estas 28 personas es acompañarlas en la estabilización emocional y en la formación de más de 400 horas en temáticas relacionadas con la oferta del Cauca para que ellos puedan salir y conseguir un empleo, de la mano de la Agencia, del Sena y de la institucionalidad, para que los empresarios se sientan respaldados con persona de las que podemos dar fe que aprendieron un oficio", indicó Joshua Mitrotti, Director General de ACR.
A su turno, Alfonso Prada, director Nacional del SENA, señaló: "Este ha sido un departamento muy golpeado por la violencia y mostrar desde aquí que sí es posible hacer procesos de reintegración y de vinculación a entidades como el SENA de desmovilizados de las FARC y del ELN, muestra una voluntad de paz del Gobierno y que sí es posible hacer las cosas bien en Colombia".
Durante la jornada, los directores nacionales y regionales de las entidades vinculadas, así como instructores, profesionales reintegradores y aprendices, disfrutaron de un menú especial, preparado por el grupo de personas en reintegración que se está formando en Cocina. Posteriormente, se abrió un conversatorio, se entregaron certificaciones a quienes culminaron su formación en Electricidad Básica, y luego, se hizo un recorrido por cada uno de los ambientes de formación.
En Colombia se han adelantado otros modelos de reintegración temprana, pero con enfoque rural. Uno de ellos, en el Eje Cafetero, con la vinculación del Parque Nacional de la Cultura Agropecuaria – PANACA. Otro, en el Valle del Cauca, en convenio con la Sociedad de Agricultores y Ganadores del Valle – SAG. Ahora, el departamento del Cauca lidera este piloto, con la articulación del SENA, enfocado en el sector industrial y de servicios.
(*) Nombres cambiado a petición de la fuente.