Tras cumplir trece años de la masacre de Bojayá en este mes de mayo, el líder de la coordinación regional de víctimas del pacífico, Leiner Palacios, quien vivió en carne propia el lamentable hecho que ocasionó la muerte de 79 personas en el Chocó, resalta la importancia del perdón.
Leiner Palacios estaba en misa a las 6 de la mañana el 2 de mayo de 2012 junto con sus paisanos de Bojayá, resguardándose de un combate entre las Farc y las Autodefensas, cuando de repente cayó un cilindro bomba de la guerrilla en medio de la iglesia San Pablo Apóstol que dejó sin vida a 48 niños y 31 adultos.
Palacios se salvó de milagro, en medio del caos y de las escenas dantescas que ocasionó ese episodio de terror, tuvo tiempo de proteger su vida en la casa de las hermanas misioneras, contigua a la iglesia. Desde entonces no ha olvidado ese lamentable hecho y se convirtió en el coordinador regional del pacífico, vocero de las víctimas de Bojayá e hizo parte de la comisión de víctimas que viajó en agosto de 2014 a La Habana en el marco de los diálogos de paz que adelanta el Gobierno Nacional con la guerrilla de las Farc.
Con el propósito de plantear posturas frente a la construcción de la paz, así como sensibilizar e informar de manera responsable sobre los avances y retos de diferentes organizaciones que trabajan día a día por este propósito, se llevó a cabo en el municipio de La Plata, al suroccidente del Huila, el foro: 'Condiciones para garantizar la refrendación de los acuerdos, la reconciliación y la reinserción: papel de la sociedad civil'.
En el evento Leiner Palacios hizo un llamado a reflexionar sobre los procesos de perdón y aseguró que todas las víctimas deben avanzar en el proceso de perdón y dar nuevas oportunidades en la vida a quienes pudieron hacerles daño a través de la violencia.
"El tema del perdón yo lo veo como una oportunidad para seguir viviendo conmigo mismo, pues para estar tranquilo y seguir adelante con la vida, es bueno perdonar" afirmó el líder de la coordinación regional de víctimas del pacífico, quien ratificó que "si queremos cambiar este país, las víctimas tenemos que empezar los procesos de perdón urgentemente".
En su intervención, Palacios enfatizó en que para la construcción de paz hay que dejar de lado los odios y la venganza. "Lo que tenemos claro es que las víctimas debemos pensar que no podemos responder con la misma violencia que hemos recibido, porque lo que queremos es cambiar este país. ¿Qué tal 7 millones de víctimas respondiendo con la misma violencia, pues entonces volvemos este país un desastre?", puntualizó.
Por su parte, Carlos Castrellón, coordinador de la Agencia Colombiana para la Reintegración en el Huila, destacó las acciones de reconciliación que realizan las personas desmovilizadas que hoy se reintegran a la sociedad, a través de acciones de servicio social.
"Mediante 80 horas de trabajo voluntario, aportan su tiempo y trabajo para realizar acciones que beneficien a las comunidades, construyendo escenarios fundamentales para generar la reconciliación entre las personas desmovilizadas y la sociedad con el fin de mejorar su calidad de vida" manifestó el funcionario.
El evento contó con la participación del asesor departamental de paz en el Huila, Olmo Guillermo Liévano, el asesor de la oficina del Alto Comisionado para la Paz, Teylor Valbuena, la representante de la Corporación para la Participación Ciudadana (Conciudadanía), Luz Mery Hernández, y el director de la corporación Podión, Jaime Díaz y fue convocado por la Corporación Nuevo Municipio, el Fondo Sueco-Noruego de cooperación con la sociedad civil colombiana (FOS) y la gobernación del Huila, a la cual fue invitada la Agencia Colombiana para la Reintegración (ACR) con el fin de llevar exponer ejemplos de paz, reconciliación y reintegración en los territorios.