Hacer pedagogía sobre el fin del conflicto y sobre la construcción de la paz en Colombia, fue el objetivo del evento 'Hagamos las paces', en el que participaron personas reintegradas en el Cauca, con la Agencia Colombiana para la Reintegración.
La academia tiene un papel fundamental en la sensibilización y pedagogía para la construcción de paz en el país. Es por eso que la Agencia Colombiana para la Reintegración (ACR), a través de su Punto de Atención en el Cauca, participó en la jornada universitaria 'Hagamos las paces' que se desarrolló en la Universidad del Cauca, en Popayán.
Este evento, que contó con una variada programación dirigida a los jóvenes universitarios, incluyó un panel denominado 'Experiencias significativas en construcción de Paz en el Cauca', en el que personas que pertenecieron a grupos armados ilegales, compartieron al auditorio sus testimonios de vida y de cómo puede seguirse preparando Colombia para pasar la página de la violencia.
En este panel, Adriana*, una mujer que fue reclutada a sus 16 años de edad por un grupo guerrillero, y que logró desmovilizarse y reintegrarse, compartió escenario con Rubén Darío y Alexis, dos personas reintegradas de Ortega, Cajibío, quienes también contaron sus experiencias. "La paz no se logra sólo con que se firme un acuerdo y tampoco se logra si desde la casa vivimos en conflicto. Para construir paz tenemos primero que desarmar nuestros corazones", expresó Adriana.
"Vale la pena reintegrarse. La reintegración a mí me devolvió la libertad, porque la libertad no es solo salir del grupo sino superar esos traumas y miedos. Gracias a la reintegración logré sanar las heridas que la guerra me causó, porque uno de allá sale con una mano adelante y una atrás. Hoy yo sigo armada, pero armada de valor", agregó esta joven, quien está finalizando su proceso de Reintegración con la ACR y también trabaja como Promotora de Reintegración.
En este espacio también intervinieron otros actores que abandonaron grupos de insurgencia. Entre ellos, Elizabeth Caicedo Del Corral, integrante de la Red Nacional de mujeres excombatientes de la insurgencia, quien explicó que esa organización ha logrado reunir a cerca de 500 mujeres de varias regiones del país, desmovilizadas de movimientos como el EPL*, PRT*, M-19, Quintín Lame, quienes llevan varios años trabajando por la participación de la mujer en escenarios de inclusión social, fuera del conflicto armado.
"La Paz no es la ausencia de conflicto. En Colombia necesitamos un cambio en la manera de resolver los conflictos para lograr que esta sociedad dé pasos a su transformación, y tiene que ver no sólo con los que están en la guerra y en el monte, sino también con los empresarios, con los políticos y la sociedad en general", dijo.
Para el Rector de la Universidad del Cauca, Juan Diego Castrillón, "Las universidades como instituciones del pensamiento tienen un compromiso con la paz, con la cultura de la tolerancia, el diálogo, los argumentos, los consensos. Hay que fortalecer los sueños que tienen los muchachos universitarios, de mejor sociedad, de justicia social, de tener una mejor economía. Por eso, presentarles experiencias de personas que han estado en estructuras (armadas ilegales) es una manera de mostrarles que no es posible cumplir esos sueños a través de la violencia. El cambio es posible pero con procesos institucionales, sociales, fórmulas civilistas y que se proscriba la sola posibilidad de pensar en un arma como un instrumento de transformación social".
'Hagamos las paces' es una iniciativa que lidera la Oficina del Alto Comisionado para la Paz, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo –PNUD– en Colombia, con el apoyo de la Universidad del Cauca. Esta jornada también se ha realizado en Cartagena, Medellín y Bucaramanga.
*Adriana: Nombre cambiado por seguridad de la fuente.
*EPL: Ejército Popular de Liberación.
*PRT: Partido Revolucionario de los Trabajadores.