Niños, niñas, jóvenes y adolescentes de los barrios Las Delicias y Brisas del Guatiquía dicen sí a entornos protectores, a través de estrategias culturales y artísticas.
Al ritmo de la melodía 'Color esperanza', habitantes de los barrios Las Delicias y Brisas del Guatiquía dieron inicio a la segunda fase de la estrategia 'Mambrú no va a la guerra, este es otro cuento', en la que participan más de 100 niños, niñas, jóvenes y adolescentes, quienes a través de manifestaciones artísticas se concentran en el mejor aprovechamiento de su tiempo libre.
"Venimos trabajando en el fortalecimiento de entornos protectores para la niñez. Por ello, a través de Mambrú buscamos restarles menores a las drogas y a la violencia, y que encuentren en el arte y la música el camino hacia la sana convivencia y la reconciliación", expresó Álvaro Guzmán, asesor de comunidades en Meta y Orinoquía, de la Agencia para la Reincorporación y la Normalización (ARN), antes Agencia Colombiana para la Reintegración.
Antecedentes
La primera versión de Mambrú, en el barrio Las Delicias, se realizó en 2014. Tras un diagnóstico se lograron identificar las necesidades de la comunidad y así fue como se entregaron cuatro guitarras, tres violines, 15 flautas, una batería, un acordeón, dos arpas, tres cuatros y dos juegos de congas.
Mambrú fue pionera en temas de prevención del reclutamiento en la comuna tres, y permitió que otras instituciones fijaran la mirada en este lugar. "Ha sido una estrategia muy importante porque nos ha fortalecido a nivel comunitario e institucional", dijo Saúl Pérez García, presidente de la Junta de Acción Comunal del barrio Las Delicias.
Durante más de 10 meses, 60 NNJA recibieron clases de formación musical; después de esto, universidades públicas y privadas en la capital del Meta continuaron el ejercicio de enseñanza.
El regreso de Mambrú
Actualmente más de 100 niños, niñas, jóvenes y adolescentes asisten todos los sábados a clases de formación musical. Adicional a ello, tienen acceso a las escuelas joropo y de fútbol, a los refuerzos escolares para estudiantes de primaria y secundaria, y a las actividades de promoción del sano aprovechamiento del tiempo libre.
La segunda fase de la estrategia Mambrú cuenta con el apoyo de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM)".
"La intención es fortalecer la capacidad instalada que se dejó en la primera fase y seguir fomentando espacios sanos en comunidades vulnerables, foco de violencia", dijo Juan Carlos Silva, coordinador en el Meta y la Orinoquía de la ARN.